Fundados a principios del siglo XX, estos asentamientos colectivos ayudaron a moldear la identidad del país.
Basados en la idea de que todo, desde la comida hasta los niños, se debería compartir, los jóvenes inmigrantes fundadores del primer kibutz rechazaron el antiguo estilo de vida europeo y buscaron la forma de crear un sistema de igualdad completo.
Era un concepto totalmente radical, pero sin él, Israel sería un lugar totalmente distinto hoy en día.
Pero ¿por qué se crearon los kibutz, cómo funcionaban (¿funcionaron?) y qué queda (si queda algo) de estas utopías comunales?