Israel tiene una sociedad muy heterogénea. Muchas veces ese fraccionamiento provoca tensiones internas que parecen irreconciliables. La pregunta más importante es si las fuerzas que unen a las personas en Israel son especialmente más fuertes que las que separan a dichos habitantes. Si la respuesta es positiva entonces podrá decirse que Israel tiene una sociedad que es fuerte. Si tienen ganas, hagan en clase una lista de todas las cosas que pegan a las personas y en otra las que nos aleja. En la actualidad se cree que nuestras diferencias sociales son una de las fuentes de la fortaleza nacional. Cada pequeña tribu aporta lo suyo y muchas veces se van fusionando familias creando un modelo nuevo de israelí que no es provocado a la fuerza sino que va surgiendo naturalmente.